La Fiscalía de París anunció este viernes en un comunicado que se abrió una investigación sobre los ataques incendiarios a las redes ferroviarias llevados a cabo por vándalos.
Los fiscales explicaron que tienen “competencia sobre los delitos que implican el deterioro de la propiedad que amenazan los intereses fundamentales de la nación”, añadiendo que el incidente en cuestión conlleva una pena de hasta 20 años de prisión y multas de 150.000 euros.
Mientras tanto, el operador ferroviario estatal SNCF advirtió al público que las interrupciones del tráfico podrían continuar más allá del fin de semana.
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