El gobierno haitiano ha declarado el estado de emergencia y un toque de queda nocturno en Puerto Príncipe después de un violento ataque a una cárcel que resultó en la fuga masiva de miles de presos y la muerte de al menos diez personas. La medida, que impone restricciones en el departamento Ouest, incluyendo la capital del país, estará vigente desde las 18:00 hasta las 05:00 horas locales hasta el próximo miércoles 6 de marzo, con posibilidad de extensión.
Mientras tanto, el Primer Ministro interino del país, Patrick Michel Boisvert, firmó la declaración en ausencia del Primer Ministro Ariel Henry, quien se encontraba en Kenia para negociar el envío de policías africanos bajo el respaldo de la ONU con el fin de combatir la creciente inseguridad en Haití.
Las autoridades han justificado estas medidas como necesarias para restablecer el orden y enfrentar la creciente violencia criminal en Puerto Príncipe, especialmente a raíz de la fuga de presos considerados peligrosos, que representa una amenaza a la seguridad nacional.
La policía ha recibido instrucciones de hacer cumplir estrictamente el toque de queda y detener a quienes lo violen. Haití, un país caribeño azotado por la pobreza, ha estado inmerso en una profunda crisis política, humanitaria y de seguridad desde el asesinato del Presidente Jovenel Moïse en 2021.
La fuga en la Penitenciaría Nacional de Puerto Príncipe, causada por un ataque de bandas armadas, dejó un rastro de muerte y caos, con varios miles de reclusos escapados y al menos una decena de personas fallecidas. La situación se vio agravada por la falta de control en la cárcel, donde antes del incidente había cerca de 3.800 presos y tras el ataque solo quedaban alrededor de cien.
Bandas criminales habían realizado previamente ataques en la capital con el objetivo de derrocar al Primer Ministro Ariel Henry, desencadenando una serie de eventos violentos que culminaron en la fuga masiva de presos y la crisis actual en el país caribeño.